30 de junio de 2014

Las lecturas de Junio

Traducción de Amelia Pérez de Villar
Con el oficio de una veterana, Kushner nos pasea desde las carreras de velocidad en la desierta Nevada hasta la Italia de las Brigadas Rojas, pasando por el artísticamente emergente Nueva York de los años 70, siguiendo a la protagonista de esta inusual y excelente novela de formación, recorriendo con ella los polos de un mundo en cambio permanente en busca de las respuestas que, a los veinte años, todos nos deberíamos haber hecho. 
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Els llibres d'aforismes mai han deixat d'estar de moda. Els de Pons no són acadèmics, no miren gaire més enllà de la quotidianitat i eviten l'homilia moralista tant com l'engolament sectari; són tot just guspires de reflexió a peu de carrer, arrelades en el camp menorquí, provocades pel vol d'un ocell, la maduració d'una figa o el sobtat ruixat d'estiu. En comptes d'una guia per a la vida, una cel·lebració del fet d'estar vius. Espectacular.
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Traducción de Cruz Rodríguez Juiz

La bisoñez del comunismo americano y algunas de las razones por las que nunca ha dejado de ser una ideología marginal en el paraíso capitalista, el medio en el que las condiciones para su implantación son/parecen paradigmáticas; las resacas de la postguerra, de la guerra fría, del sovietismo, del macarthismo, del hippismo, Vietnam, y su lenta y prolongada asimilación como residuos sólidos que cada época ha dejado pendiente de diluir y que no deberían obturar los sumideros de la época sucesiva. Todo esto, y mucho más, desde el punto de vista de una familia contestataria en una compleja y excelente novela -tal vez complementaria de la sorprendente Chronic City, con la que comparte, a pesar de las diferencias a primera vista, la mirada crítica- con un magistral diseño narrativo de las situaciones en que se ven envueltos los protagonistas, unas descripciones detalladas pero  suficientes y un desarrollo por episodios hábilmente tratados desde el punto de vista temporal; una novela ambiciosa cuya opción estilística se propone escribir el mundo y, a la vez, describir los grandes hechos de la historia a través de las pasiones de sus personajes.
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Picnic al borde del camino. Arkady y Boris Strugatsky, Archivo digital
La escuela de SF soviética no fue igual de fructífera ni tan conocida como la norteamericana, pero algunos de sus autores, inicialmente censurados o directamente deportados por las autoridades, han pasado a la posteridad como verdaderos creadores de género; ante la SF utópica occidental, ellos se recrearon la ficción alegórica, textos que rezuman una crítica social implacable y con varios niveles de lectura, entre ellos, el político. Picnic al borde del camino, basada en la búsqueda de un objeto, olvidado por una civilización extraterrestre que ha estado de visita en la Tierra, que puede satisfacer todos los deseos de su poseedor, se conserva en un estado envidiable después de más de 40 años de su publicación en la URSS. Por cierto, no existe ninguna edición disponible ni siquiera en el mercado regular de libro usado; que una de las novelas fundamentales de la bibliografía de la ciencia ficción no esté disponible en castellano es un lujo que sólo la miopía y la incompetencia del mundo editorial puede permitirse. 
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Bonus track 1
StalkerGuión de Arkady y Boris StrugatskyDirección de Andrei Tarkovski, 1979
Versión cinematográfica libre de Picnic al borde del camino, en la que se modifica y simplifica la trama conservando sólo ciertos ítems que dan consistencia al relato, aparte de limitar la acción al transcurso de un solo día. Se trata de un film en el que adquieren suma importancia el tratamiento visual clásico del director, con largos planos fijos con una esmerada elaboración, y en el que los diálogos sirven de puente entre las distintas secuencias. Se trata, desde el punto de vista muy particular de alguien no experto en el medio, de una peculiar obra maestra de la cinematografía, pero también de la narratividad, indiscutible e imprescindible.
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Bonus Track 2

Traducción de Cruz Rodríguez Juiz
Dyer, en un ejercicio estilístico e intelectual de notable talento que no es una novela ni un relato ni un ensayo, parte de la película de Tarkovski y, al tiempo que intenta desentrañar, plano a plano, los pasajes más oscuros, guía al lector hacia una versión muy personal de esa Habitación complaciente en la que el propio escritor es el protagonista a la busca de la realización de sus deseos pero también de la congruencia de algunos episodios de su vida con el plan establecido -y reformulado continuamente- y de su relación con el arte. El libro carece de sentido si, a) no eres fan acérrimo de Stalker; y/o, b) no eres fan irredento de Tarkovski; y/o c) no acabas de ver la película; y/o, d) no acabas de leer el libro. Una apuesta narrativa arriesgada, ineludiblemente ligada a la película, que constituye un original y atractivo acercamiento a una obra de arte ciertamente inasible.
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Traducción de Ana Antón Pacheco
Pues sí, a principios de los '60 del pasado siglo la revolución en las letras norteamericanas había comenzado; pasados 50 años, y cuando parece que la experimentación en narrativa ha colapsado, Gass se sigue leyendo como un autor de rabiosa actualidad... excepto en el mercado en español. De lectura tan absorbente como desasosegante, el flujo de conciencia y la verborrea errática de sus narradores, encarcelados en su propia insignificancia, secuestra la atención del lector en lo que parece "un resbalón repentino sobre el límite de la realidad"; cinco narraciones independientes pero que forman una extraña unidad sin trama -por lo demás, innecesaria-; cinco relatos basados en una fijación, enclaustrados en una insólita cotidianidad que les atenaza hasta inmovilizarlos: "no podía librarme de mi punto de vista"; unos diálogos psicóticos cuya ambigüedad desemboca en una pesadilla incongruente; el retrato de un paisaje que más que un marco es un estado de ánimo; y la sensación de hallarse ante una fábula sin moraleja. Imprescindible.
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Traducción de Rubén Martín Giráldez
El deseo inconfesable de todo gestor de parques temáticos, la explotación ilimitada del concepto de centro lúdico: crear uno capaz de satisfacer todos tus deseos y todas aquellas necesidades que todavía no sabes que tienes: ya no basta con satisfacer el ansia de consumo, sino provocar reacciones emocionales. Una alarmante distopía que, mediatizada por la objetividad del estilo cuasi-periodístico, sacude al lector más por su cercanía que, aunque también, por su inventiva.
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Traducción de Javier Albiñana
El infierno existe, y está entre nosotros: es el conjunto de posibilidades no realizadas, los pasos omitidos, las decisiones que no nos atrevimos a tomar. El fiel pero sarcástico narrador de Echenoz, marca de la casa, sigue los pasos de un pianista acomplejado de botella a concierto y a botella de nuevo, y persigue a su fantasma en una existencia post-mortem en la que nada es lo que parece. No es de los mejores Echenoz, pero hace patente que su capacidad para la narratividad es indiscutible.
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Traducción de Carme Camps Monfà
Desde la interconexión de textos automáticos dictados desde el más allá por insignes, respetables y reprimidos fallecidos británicos, en la época victoriana, con el puente de H. G. Wells y Maksim Gorki, hasta la aplicación del materialismo dialéctico retomada por los bolcheviques a la cuestión de la inmortalidad -a la inmortalidad por el exterminio-, Gray nos lleva de la mano, con erudición pero inteligiblemente y sin excluir las notas socarronas típicamente británicas -"instruir deleitando"-, a través de los intentos modernos de alcanzar la inmortalidad. Un texto asombrosamente revelador.
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