Cuatro caminos hacia el perdón. Ursula K. Le Guin. Minotauro, 2021 Traducción de Ana Quijada |
La mayor parte de la producción novelística de Ursula K. Le Guin se agrupa en ciclos, es decir, en obras que se ubican en un período y localización determinados y que comparten, aparte de personajes, un mundo que se concreta y cartografía a medida que va incorporando títulos; de los dos grandes ciclos, el de Terramar contiene más de diez unidades, entre novelas, novelas cortas y relatos; el de Hainish, o Ekumen, está compuesto por siete novelas de variada extensión, y dieciséis relatos, escritos a lo largo de tres décadas. Cuatro caminos hacia el perdón (Four Ways to Forgiveness, 1995), perteneciente a esta última serie, contiene cuatro relatos con un denominador común: el perdón y la redención.
La noción de castigo, en su acepción de "pena que se impone a quien ha cometido un delito o falta" (DLE), en una sociedad fuertemente estratificada, conlleva por fuerza la distinción en función de quién tiene la capacidad connatural de imponerlo y quién carece de ella; por la misma razón, la concesión y el alcance del perdón sufrirán la misma limitación, y deberá distinguirse entre aquellos individuos predestinados a concederlo y aquellos a los que, debido a esa segmentación, se ven imposibilitados de dispensarlo.
El hecho de que las relaciones entre las diferentes capas sociales estén reguladas por la desigualdad marcará que los diversos niveles de implicación personal, desde la educada indiferencia hasta la relación más estrecha, conlleven desiguales gradaciones de ese perdón, de modo que su intensidad sea función de esa complicidad y no tanto de la importancia, sea desde el punto de vista social como del personal, de la falta cometida, ni de la magnitud de la ofensa ni de su duración.
Tampoco parece que, caso de incluirlo, el componente compasivo de ese otorgamiento de perdón tenga la misma gradación cuando es el ofendido quien pertenece a la élite que cuando es el perdonado el que pertenece a ese estrato social privilegiado. De las cuatro variantes que pueden darse del binomio ofendido-ofensor en situaciones de desigualdad acentuada (1. ofendido y ofensor de la élite; 2. ofendido de la élite y ofensor común; 3. ofendido común y ofensor de la élite; y 4. ofendido y ofensor comunes), solo aquellas que implican o igualdad de los intervinientes (opciones 1 y 4) o posición superior del agraviador (opción 3) pueden considerarse susceptibles de perdón.
Por cierto, ¿existe algo parecido al perdón en otras especies?
Otros recursos relativos a la autora en este blog:
Fe de Lectura de Contar es escuchar
Fe de Lectura de La rueda celeste
Notes de Lectura d’Els desposseïts
No hay comentarios:
Publicar un comentario