Historia de una demencia colectiva. Friedrich Reck-Malleczewen. Reino de Redonda, 2018. Traducción de Herman Mario Cueva. Epílogos de Q. Principe e I. Reck-Melleczewen |
Entre febrero de 1534 y junio de 1535 -en plena reforma protestante y en vida de Martín Lutero, que había colgado sus noventa y cinco tesis en la puerta de la iglesia del castillo de Wittenberg en octubre de 1517; y diez años después del conflicto de los campesinos alemanes- en la localidad de Münster, en la región histórica de Westfalia, al este del territorio de la actual Alemania, tuvo lugar una rebelión religioso-política provocada por una secta radical del anabaptismo holandés que estableció una teocracia bajo el liderazgo de Jan Matthys, un panadero de Harlem, y Jan Bockelson o Jan van Leiden, un sastre de esa ciudad holandesa, y que contó, en principio, con el favor de la población. Después de abolir la propiedad privada y suprimir la moneda, proclamaron su independencia de la iglesia oficial y validaron la poligamia, que llegó a ser obligatoria, contando con el tácito o expreso acatamiento de la mayor parte de la población. Con posterioridad, y debido a las carencias en víveres a causa del sitio a que fue sometida esa Nueva Jerusalén, para hacer frente a las deserciones de sus conciudadanos, instalaron un régimen de terror que diezmó a la población que no había perecido por las privaciones o las enfermedades. Finalmente, el 24 de junio de 1535, las tropas del arzobispo Waldeck, apoyadas por batallones enviados por varios príncipes alemanes, tomaron Münster y detuvieron, torturaron y ejecutaron a los cabecillas de la rebelión, cuyos cuerpos, para escarmiento público, fueron expuestos en tres jaulas metálicas suspendidas de la torre del campanario de la iglesia de San Lamberto.
Friedrich Reck-Malleczewen, el escritor alemán autor de Diario de un desesperado, publicó en 1937 Historia de una demencia colectiva (Bokelson. Geschichte eines Massenwahns; el libro fue inmediatamente secuestrado por las autoridades y no fue publicado de forma definitiva hasta 1946), en la que narra y analiza en clave de locura colectiva los hechos acaecidos en Münster cuatro siglos antes, combinando una acertada visión histórica centrada en el personaje de Jan van Leiden y un análisis tras el que se oculta un pensamiento conservador y reaccionario que, al menos para este lector, absolutamente ignorante en cuestiones historiográficas, echa a perder totalmente el texto.
Calificación: Sin calificación
No hay comentarios:
Publicar un comentario