Por una parte, ciertas obras sitúan la acción narrativa en un futuro, próximo o remoto, en el que el ser humano cuenta con unos recursos tecnológicos de los que hoy carecemos: la cuestión anticipatoria basa su ecosistema narrativo en unos supuestos avances de la ciencia y de la tecnología aeroespaciales que hacen posible la conquista de planetas y galaxias remotos -utopías en 2001, una odisea del espacio (2001: A Space Odissey, 1968) de Arthur C. Clarke, o Trilogía de la Fundación (Fundación (Foundation, 1951); Fundación e Imperio (Foundation and Empire, 1952); Segunda Fundación (Second Foundation, 1953)) de Isaac Asimov, o distopías en La isla (Island, 1962) de Aldous Huxley, o ¿Sueñan los androides con ovejas eléctricas? (Do Androids Dream of Electric Sheep, 1968) de Philip K. Dick-.
Pero también, y sobre todo a partir de los años 80 del pasado siglo,
Sin embargo, la relación más estrecha se ha basado en la manipulación temporal que suponen los viajes en el continuum temporal mediante el recurso a hipotéticas máquinas del tiempo, a la hibernación mediante crionización del viajero o a especulaciones sobre la Teoría de la
Relatividad , los agujeros negros, los bucles temporales o los saltos involuntarios en el tiempo, generadores de una amplia bibliografía cuyo paradigma sería la magnífica La máquina del tiempo (The Time Machine, 1895) de H. G. Wells, y en una triple vertiente: los viajes al futuro, generalmente para importar conocimientos tecnológicos -Cronopaisaje (Timescape, 1980) de Gregory Benford- o para inspeccionar ese futuro, en el caso distópico, y tomar las medidas oportunas para que nunca suceda -El informe de la minoría, un relato
corto incluido en el IV volumen de la edición de los Cuentos Completos (Minority Report, 1956) de Philip K. Dick-; los viajes al pasado, con el fin de modificar aquellos aspectos del presente que no poseen las propiedades y características deseadas
-El fin de la eternidad, una novela que forma parte de los escritos con trama independiente pero adicionales a las series de La Fundación (The End of Eternity, 1955) de Isaac Asimov-; y la exploración de los tiempos paralelos, la creación de realidades simultáneas y alternativas y la dificultad de asimilación del desdoblamiento de la realidad -Tiempo desarticulado, también del omnipresente Philip K. Dick, "el Shakespeare de la Ciencia Ficción", Fredric Jameson dixit-.
corto incluido en el IV volumen de la edición de los Cuentos Completos (Minority Report, 1956) de Philip K. Dick-; los viajes al pasado, con el fin de modificar aquellos aspectos del presente que no poseen las propiedades y características deseadas
-El fin de la eternidad, una novela que forma parte de los escritos con trama independiente pero adicionales a las series de La Fundación (The End of Eternity, 1955) de Isaac Asimov-; y la exploración de los tiempos paralelos, la creación de realidades simultáneas y alternativas y la dificultad de asimilación del desdoblamiento de la realidad -Tiempo desarticulado, también del omnipresente Philip K. Dick, "el Shakespeare de la Ciencia Ficción", Fredric Jameson dixit-.
Tiempo desarticulado. Philip K. Dick, Ediciones Minotauro Traducción de Rubén Masera |
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